1– ¿Existe un tiempo determinado para reencarnar?
El estado de la erraticidad, como denominaba Allan Kardec (el Codificador del Espiritismo) a la vida espiritual, es variable. Podemos permanecer un año o un milenio. Depende de nuestras necesidades y opciones.
2 - ¿Dónde estamos más tiempo, en la Tierra o en el Más Allá?
Tendemos a permanecer más tiempo en el mundo espiritual, incluso por una cuestión de disponibilidad reencarnatoria. La población desencarnada es mucho más numerosa, cerca de 20.000 millones. No están equivocados los compañeros que hablan de la necesidad de valorar la experiencia humana, considerando que en el Más Allá hay filas aguardando la inmersión en la carne.
3 – ¿No sería una pérdida de tiempo estar tanto tiempo en la erraticidad?
La evolución no está subordinada exclusivamente a la vida física. Ocurre en los dos planos. El Espíritu evoluciona también en el continente espiritual, donde está nuestro hogar.
4 – ¿Qué otro criterio, además de la disponibilidad reencarnatoria, define la duración de la permanencia en el plano espiritual?
Las necesidades del Espíritu. Alguien con graves compromisos espirituales, en virtud de sus desatinos, necesitará regresar a la carne en un tiempo breve, conforme ya comentamos. Un misionero, que acostumbra venir a la Tierra para ejecutar las sagradas tareas en favor del bien común, podrá permanecer siglos en la espiritualidad.
5 – ¿Se permanece más tiempo en el mundo espiritual?
La tendencia es esa, considerándose no sólo la disponibilidad reencarnatoria, sino también el hecho de que la experiencia humana funciona como un grado escolar. El tiempo que el alumno pasa en la escuela es menor que aquel que ocupa con otras actividades.
6 – ¿El regreso a la carne es decidido por el propio interesado?
Depende de su nivel evolutivo. Espíritus más maduros, conscientes de sus responsabilidades, planifican la época de su regreso. Espíritus inmaduros son orientados y conducidos por mentores espirituales.
7 – ¿Y si el Espíritu se rehúsa a reencarnar?
Habiendo necesidad apremiante, sus mentores providenciarán la reencarnación forzosa.
8 – Al ser obligado a reencarnar, ¿será natural que el Espíritu se rebele, que no asuma sus responsabilidades?
Probablemente, al igual que el sentenciado que no se conforma con la prisión a la que fue confinado. Pero, así como la penitenciaría busca detener el comportamiento criminal, la reencarnación forzosa destruye las imperfecciones más groseras del Espíritu que va a reencarnar. Entre «llanto y crujir de dientes», según la expresión evangélica, «él madurará».
El estado de la erraticidad, como denominaba Allan Kardec (el Codificador del Espiritismo) a la vida espiritual, es variable. Podemos permanecer un año o un milenio. Depende de nuestras necesidades y opciones.
2 - ¿Dónde estamos más tiempo, en la Tierra o en el Más Allá?
Tendemos a permanecer más tiempo en el mundo espiritual, incluso por una cuestión de disponibilidad reencarnatoria. La población desencarnada es mucho más numerosa, cerca de 20.000 millones. No están equivocados los compañeros que hablan de la necesidad de valorar la experiencia humana, considerando que en el Más Allá hay filas aguardando la inmersión en la carne.
3 – ¿No sería una pérdida de tiempo estar tanto tiempo en la erraticidad?
La evolución no está subordinada exclusivamente a la vida física. Ocurre en los dos planos. El Espíritu evoluciona también en el continente espiritual, donde está nuestro hogar.
4 – ¿Qué otro criterio, además de la disponibilidad reencarnatoria, define la duración de la permanencia en el plano espiritual?
Las necesidades del Espíritu. Alguien con graves compromisos espirituales, en virtud de sus desatinos, necesitará regresar a la carne en un tiempo breve, conforme ya comentamos. Un misionero, que acostumbra venir a la Tierra para ejecutar las sagradas tareas en favor del bien común, podrá permanecer siglos en la espiritualidad.
5 – ¿Se permanece más tiempo en el mundo espiritual?
La tendencia es esa, considerándose no sólo la disponibilidad reencarnatoria, sino también el hecho de que la experiencia humana funciona como un grado escolar. El tiempo que el alumno pasa en la escuela es menor que aquel que ocupa con otras actividades.
6 – ¿El regreso a la carne es decidido por el propio interesado?
Depende de su nivel evolutivo. Espíritus más maduros, conscientes de sus responsabilidades, planifican la época de su regreso. Espíritus inmaduros son orientados y conducidos por mentores espirituales.
7 – ¿Y si el Espíritu se rehúsa a reencarnar?
Habiendo necesidad apremiante, sus mentores providenciarán la reencarnación forzosa.
8 – Al ser obligado a reencarnar, ¿será natural que el Espíritu se rebele, que no asuma sus responsabilidades?
Probablemente, al igual que el sentenciado que no se conforma con la prisión a la que fue confinado. Pero, así como la penitenciaría busca detener el comportamiento criminal, la reencarnación forzosa destruye las imperfecciones más groseras del Espíritu que va a reencarnar. Entre «llanto y crujir de dientes», según la expresión evangélica, «él madurará».
Si comenzamos a examinar las visiones básicas del movimiento Nueva Era y las religiones orientales, es bueno comenzar con la reencarnación. Esta doctrina es prácticamente el fundamento de todas las enseñanzas del movimiento Nueva Era y también una creencia básica de las religiones orientales como el Hinduismo y Budismo. Se estima que alrededor del 25 % de las personas en los países occidentales cree en la reencarnación, pero en India y otros países de Asia – de donde son originarias estas doctrinas - el porcentaje es mucho mayor. Principalmente en India y otros países de Asia han estado enseñando esta doctrina por al menos 2.000 años; estaba aceptada generalmente alrededor del año 300 antes de Cristo, no mucho antes de eso.
ResponderEliminarLa gente que cree en la reencarnación piensa que la vida es un círculo continuo; cada persona nace en la tierra una y otra vez, y siempre volverá a encarnar nuevamente, dependiendo de cómo haya vivido en su vida anterior. Todas las cosas malas que nos suceden hoy en día, sólo son el resultado de acciones anteriores. Ahora debemos cosechar lo que hemos estado sembrando en vidas previas. Sin embargo, si no recibimos la iluminación y al mismo tiempo la libertad de este círculo (obteniendo moksha), este círculo continuará para siempre.
En el mundo occidental, recibir moksha no es tan importante. En cambio, en el mundo occidental la reencarnación es vista de una manera positiva, mayormente como la posibilidad de desenvolverse y crecer espiritualmente. No tiene las mismas connotaciones negativas.
Pero, ¿qué deberíamos pensar con respecto a la reencarnación? ¿Existe realmente? ¿Vale la pena creer en ella? Trataremos de abordar estas cuestiones en este artículo.
http://www.jariiivanainen.net/reincarnacion.html