¿Que es la Asistencia espiritual?

Es el trabajo que realizan los Espirítus, mediante el auxilio de los médiums, con el fin de equilibrar, aliviar y curar las enfermedades del cuerpo y del alma. Actuando a través de los médiums, utilizan sus manos hábiles, visibles e invisibles, para extirpar los males físicos de forma indoloro, sin hacer uso de cualquier instrumento. Mediante la mediumnidad de cura a servicio del Bien y de forma desinteresada, los Buenos Espirítus, alivian los dolores, alejan las perturbaciones y nos despiertan para la realidad espiritual.

Es impensable la práctica del Espiritismo en las Casas Espiritas sin la realización de los trabajos de asistencia espiritual: desobsesión, cura y pases; y no se comprende la práctica de los mismos sin el desarrollo y práctica de la mediumnidad que nos proporcionan mensajes que consuelan y esclarecen.

Los distintos tipos de Asistencia Espiritual atiende a casos de envolvimiento espiritual profundo (intensa influencia espiritual), que resultan en tensión nerviosa, stress, fuertes dolores en el bulbo, presión frontal, insonmio, pesadillas, manías de persecución, odios, envidias, inconformismo, desvíos sexuales, vicios de todo tipo (alcohol, drogas, tabaco, medicamentos...)

Es sabido que la adicción a las drogas, al alcohol, al tabaco, a medicamentos; la compulsión al juego, al sexo, a las compras... nos alteran y nos perturban emocionalmente, perjudican nuestras relaciones familiares, sociales, obstruyen nuestras conquistas en el campo profesional, desequilibran nuestra salud y estancan nuestro crecimiento emocional y psíquico.

Desarmonías en el hogar, discusiones y desentendimientos continuos (con marido, esposa, hijos, familiares cercanos o no) además de horribles, son siempre factores de desequilibrios. Muchas veces las pequeñas desavenencias se convierten en verdaderos infierno, haciendo que pierda las ganas de volver a casa.

Depresiones, conflictos afectivos, desempleo o insatisfacción con el trabajo, crisis familiares, incomprensiones, homosexualidad no aceptada, complejos, agresividad, miedos... generan igualmente sufrimientos.

Muchas veces, tales perturbaciones tienen como causa la influencia espiritual, es decir, espíritus desencarnados que, pese a no pertenecer más en este Plano Terrenal, siguen a nuestro lado como si aquí aun vivieran. Estos pueden ser nuestros enemigos del pasado (otras vidas) que desean vengarse, o pueden ser simplemente Espíritus que se acercan debido a la sintonía vibratoria ejecutada por nuestros pensamientos y actitudes, que les atraen y nos ligan a ellos en régimen simbiótico.

Puede ser aun, el Espíritu de algún familiar o de un ser querido... Hay casos en que los mismos, habiendo fallecido a causa de grave enfermedad, al acercarse a nosotros y es tal el envolvimiento espiritual que asimilamos los síntomas y los manifestamos como si fueran nuestros, o sea, como si también padeciéramos tal enfermedad.

Un envolvimiento espiritiual profundo puede provocar aun, ataques epilépticos, desfallecimientos, crisis alucinatorias, ideas fijas de venganza, de suicidio, manias persecutoria, apatía, compulsiones, disminución de la capacidad de tomar decisiones, comprometimiento de los órganos físicos...

En todos los casos de envolvimiento se trata de espíritus necesitados de ayuda.

Son casos que requieren, específicamente, tratamiento de desobsesión donde " La Misericordia Divina permite que esos Espíritus se utilicen del cuerpo de un médium para manifestarse, ser esclarecido acerca de su verdadera situación y ser encaminado al lugar que le corresponde en el Plano Espiritual. Ello es necesario porque, la mayoría de las veces, esos espíritus perturbados creen que aun pertenecen al Plano Físico y sus fluidos, todavía groseros, impiden que sean asistidos por los Espíritus más adelantados en la escala evolutiva. Así que ellos son llevados a los grupos de asistencia espiritual para ser instruidos y esclarecidos... ("En el Invisible", León Denis).

"Son almas que, sufriendo turbación mental, acompañan a los parientes, amigos o desafectos, a las reuniones públicas de la institución y que se desligan de ellos cuando ellos se dejan envolver por las ideas renovadoras de la enseñanza doctrinaria”. (“En los Dominios de la Mediumnidad”, André Luiz)

A esos Espíritus se les denomina de obsesores. Solo el adoctrinamiento (“El adoctrinamiento es una técnica usada para conducir hacia la luz a los espíritus desencarnados, especialmente a los obsesores, mediante esclarecimiento. Esa técnica fue creada y desarrollada por Allan Kardec para sustituir las prácticas arbitrarias del exorcismo.”), practicado de forma paciente y cariñosa, a través del Evangelio, consigue liberarlos (obsesor y obsedado) de esa impregnación viciosa” (Kardec).
Muchos de ellos, después de un tiempo, suelen regresar al Centro en donde empiezan a actuar como colaboradores, prestando la misma asistencia que un día recibieron.

“Algunas veces, lo que le falta al obsedado es fuerza fluidica suficiente; en este caso, la acción magnética de un buen magnetizador puede ser de gran utilidad”.(Kardec)

No siempre el desligamiento ocurre en un primero tratamiento. Hay espíritus muy empedernidos que se obstinan en la práctica del mal. Generalmente, una vez que procede al desligamiento, el asistido suele sentirse algo debilitado, especialmente si el proceso de obsesión fue de larga duración. Es necesario, entonces, proceder a una donación de energías para fortalecerle y restablecer su equilibrio orgánico. Todo ello hace parte de la Asistencia Espiritual especializada. La desobsesión es tratamiento especializado que requiere médiums preparados, ambiente adecuado, disciplina, amor y conocimiento. Requiere, además, conocimientos y un ambiente adecuadamente preparado.