viernes, 25 de septiembre de 2009

Los Males del Vampirismo III


Pregunta: Reconocemos que la evangelización de la humanidad sería el fin de la guerra en nuestro planeta, pero ¿quién podría convencer al general y a los soldados, empeñados tontamente en una lucha sin gloria alguna para los planos espirituales, y que incentiva el vampirismo para usufructuar el tonus vital de la sangre derramada?Ramatís: Evidentemente, la guerra no es culpa exclusiva de los militares, pero es el resultado de las cuestiones raciales, dominios ideológicos, intereses comerciales y económicos, competiciones políticas, ambiciones de conquistas y espíritu de pillaje animal, los cuales, ultrapasan a los campos de batalla. Bajo la perspectiva de guerra, todas las personas tratan de sacar provecho a la situación, en lo que respecta a los intereses personales. El soldado sueña con las insignias de sargento, y éste aspira al puesto de oficial, mientras que el oficial entrevé los galones de general. Las industrias alteran el precio de los productos,, alegando el clima belicoso, los comerciantes ocultan los productos alimenticios, esperando el momento propicio para venderlos a precios exorbitantes. Los diarios alcanzan tiradas voluminosas, saturadas de mentiras, exaltaciones raciales, incentivos y difamaciones contra los pacifistas. Los sacerdotes bendicen armas, submarinos y tanques de guerra, en nombre de "su Dios" y contra el Dios del enemigo, mujeres, niños y viejos, entre vivas y entusiasmos, se alegran con las primeras victorias sobre el adversario, justo o injusto, masacrando impiadosamente . Mientras sucede todo ese drama en las naciones, los oportunistas incentivan la confusión entre odios y venganzas, organizando el pillaje sobre los bienes del extranjero radicado en su patria, practicando indignantes e inescrupulosas acciones de pillaje calculado. El espíritu de guerra alcanza a la vida civil, provocando indignas acciones contra los ciudadanos pacíficos e inofensivos .Los pueblos enemigos, que están del otro lado de la lucha, también piensan igual y accionan de la misma forma, porque la guerra es el producto de la animalidad e ignorancia de toda la hu¬manidad, cuya herencia de rencor, odio, codicia, envidia, orgullo, egoísmo y rapiñaje, es una consecuencia funesta desde los tiempos de los hombres de las cavernas. La monstruosidad de la guerra, sólo dejará de existir, en la tierra, cuando los hombres sepan dominar sus perversos sentimientos y busquen la vivencia, en la paz y el amor en los códigos morales dejados por Buda, Krisnha, Jesús, Ghandi y otros luminares de la vida espiritual. Cada hombre y cada pueblo debe negarse a sí mismo y no combatir contra otro hombre o pueblo, prefiriendo morir antes que matar ¡Podemos desconfiar de los hombres, jamás del Cristo Jesús, que prometió así: "Aquél que pierde la vida por mí, la ganará por toda la eternidad"!

Pregunta: Sin embargo, el carnivorismo y la guerra son condiciones inherentes y normales al estado actual y evolutivo de la humanidad; ¿no es verdad?

Ramatís: Si la guerra fuese una condición natural de la graduación espiritual de la humanidad, los espíritus de los civilizados no deberían sufrir perturbación alguna después de su desencarnación, cosa que es tan común aquí en el Espacio. Los salvajes, que todavía viven bajo el instinto heredado de los animales, siéndoles el carnivorismo una condición natural, cuando desencarnan, pasan a vivir en forma venturosa en las planicies de caza, en el plano astral. Su ignorancia e incapacidad de raciocinar sobre la diferencia entre lo cierto y lo errado, el bien y el mal, los libra de las puniciones o restricciones espirituales, que mientras tanto, afectan al civilizado por su conocimiento y "conciencia del mal".Nosotros no hemos encontrado a ningún salvaje en los charcos pestilentes del astral inferior, pero sí lo pueblan los hombres "civilizados" que vivieron en la tierra en medio de luchas, conflictos, revoluciones y guerras sangrientas, cuya finalidad fue matar a otros hombres, obedeciendo a órdenes superiores.Muchos de esos infelices, sumergidos en el lodo purgatorial, reflejan en su denso periespíritu, el fulgor de los trofeos guerreros, la marca de las condecoraciones que recibieron cuando estaban encarnados, por su eficiencia en matar.Desde los tiempos bíblicos, la humanidad viene describiendo una admirable espiral sobre los eventos en el campo de la técnica, física, química, astronáutica y medicina, que aumentó la responsabilidad de su discernimiento y comprensión de todo cuanto es dañino, perverso e innecesario. Sin embargo, bajo la suges¬tión diabólica del mundo invisible, esa humanidad perfeccionó y electrificó los mataderos y frigoríficos y atomizó la guerra, centuplicando los medios para matar. El troglodita mataba al compañero con un trozo de palo; el civilizado lo hace con una pistola automática. Los persas, griegos y romanos, se enfrentaban en los campos de batalla al descubierto, en una lucha atroz, más digna entre un individuo y otro, hoy, alguien aprieta un botón y la bomba mortífera pulveriza a millares de hombres, mujeres, niños y viejos, ajenos a la causa de tal agresión.Es evidente, que el canibalismo y la guerra no son condiciones normales del actual estado espiritual de la humanidad, sino, que son excrescencias degenerativas que multiplican la culpa de los hombres, porque saben como civilizados, pero viven como los bárbaros.

Pregunta: El pueblo judío, considerado como elegido de Dios, también sacrificaba aves y animales en los templos religiosos, ¿Eso se debía a la intervención de los espíritus perversos de las tinieblas?

Ramatis-. El sacrificio habitual de los toros, cabritos, carneros y aves entre los judíos, también ocultaba la sed de sangre de los monstruosos espíritus del Más Allá, los cuales, incentivaban esas prácticas a fin de compensar la reducción de las masacres humanas de los antiguos ritos paganos. Esos seres vampirizaban las carnes tiernas de las criaturas sacrificadas a los ídolos, así como los civilizados de hoy exigen, epicurísticamente, la carne en sus sabrosos platos para satisfacer su canibalismo insaciable. Los sacerdotes, que por veces percibían en su "visión astralina" la presencia de detestables vampiros succionando ávidamente el tonus vital de la sangre derramada, fingían ignorar el acontecimiento, porque vivían nababescamente de la "industria de la muerte", tal cual hoy se vive de la masacre, en los mataderos y frigoríficos.Los templos paganos, quemaban y degollaban niños y jóvenes, los templos judíos, con la mortandad de animales y aves, eran verdaderas filiales de abastecimiento del precioso alimento vital, codiciado por los espíritus subvertidos de las sombras y que todavía hoy se hace en los candomblés africanos y demás ritos primitivos. Pero, la sangre vertida inútilmente se vuelve por Ley Kármica contra sus responsables, marcándolos como futuras víctimas del vampirismo, hechicerías u obsesiones. Además, el hombre rescata, casi de inmediato, su entrega al canibalismo, puesto que hereda las enfermedades que dicha alimentación le entrega, por corresponderé en mérito a su acción. De ahí que proliferen las hepatitis, tumoraciones, anemias perniciosas, úlceras, llagas y principalmente el parasitismo incontrolable de amebas, estrongiloides, triconcéfalos, helmintos, tenias, ascárides y diversos protozoarios patogénicos .Los hombres podrían gozar de algunos conceptos favorables de parte de la Administración Sideral, aun alimentándose de carne, si se sirvieran únicamente de la caza de las aves y animales salvajes, cuyo psiquismo primario todavía no se perturba ante una muerte súbita, porque están vinculados a un Espíritu Grupo. Sin embargo, con el procedimiento civilizado, agravan sus culpas, porque detrás del disfrazado trato de casi rayando a la paternidad, tratando a los hermanos menores con vacunas, raciones es¬pecializadas y cuidados esmerados, más tarde los devoran impiadosamente bajo el toque profesional de los entendidos en vísceras cocidas o asadas.

Pregunta: ¿Cuál es la gravedad que poseemos, en la actualidad, por nuestra graduación espiritual, al alimentarnos de carnes?

Ramatís: Algunas especies animales, como el perro (can), camello, elefante, carnero, mono, gato y principalmente el caballo, tienen bastante desenvuelto su cuerpo astral, los que les permite demostrar emociones y sentimientos cuya meta es la humanización.El caballo, demuestra rudimentos de razonamientos y revela sus cualidades en el campo de la aritmética y en el discernimiento sobre los lugares que le son familiares y que recorre frecuentemente, como en el caso de los caballos de reparto, que después de determinadas enseñanzas, puede realizar el recorrido sin la intervención humana. Es evidente, que si el caballo presenta hechos que concuerdan con el "razonamiento humano", los comedores de carne de caballo comienzan a practicar nuevamente la "antropofagia", es decir, devoran carne humana.

Pregunta: Anteriormente mencionasteis, que el hechizamiento a través de los objetos materiales tiende a debilitarse debido al progreso de la Ciencia, la que va esclareciendo todo aquello que pertenece a las creencias y supersticiones, heredadas de los pueblos primitivos. ¿Nos podéis aclara mejor esa expresión vuestra?

Ramatís: En verdad, las prácticas del hechizamiento tienden a disminuir en su proceso tradicional por medio de los objetos materiales, como son el muñeco de cera, sapos, cabellos y otros tipos de condensadores de fuerzas maléficas que aportan una determinada proyección de fluidos densos en perjuicio de las víctimas. El advenimiento atómico, el dominio de los rayos, ondas, magnetismo, control remoto y las inagotables fuentes de energías descubiertas a cada paso en el mundo oculto de la materia, cuyas bases científicas se explican a través de la literatura popular, afirman la creencia y la fe de las personas en las cosas milagrosas y misteriosas.Además, los "babalaos" y africanos auténticos, que manejaban con facilidad las fuerzas ocultas y producían fenómenos poco comunes que sorprendían a los asiduos asistentes de los terreiros, después de desencarnados fueron substituidos por los nativos del país, mulatos y blancos incipientes, los que aún confunden las prácticas severas de la magia africana, con las fantasías ridículas del animismo mediúmnico y descontrolado. Así como la Astrología se distorsiona en las manos de los neófitos que confeccionan cantidades de ridículos horóscopos, tan precarios como la “buena dicha” pronosticada por los gitanos, la vieja magia africana se deforma ante los participantes de los terreiros, que son incapaces de dinamizar el doble etérico de las cosas y de los seres. Comúnmente, la magia africana de hoy, simbólicamente no es más que una colcha compuesta de retazos y fragmentos del folklore "afro-católico-amerindio" y que se deforma aún más por la infiltración intrusa de las prácticas del ocultismo oriental. La magia africana prácticamente fenece en el ambiente del mundo material, pero recrudece con fuerza y amplitud en el mundo astralino ante el aprovisionamiento indiscriminado de la sangre vertida por las mortandades en masa de los animales y aves en los frigoríficos modernos y por los hombres destrozados por las superbombas en los campos de batalla, de las guerras modernas.Mientras exista sangre a disposición de los vampiros del Más Allá, la obsesión, el hechizo, la tragedia, la desventura y las enfermedades aun serán los patrimonios kármicos de la humanidad terrícola. Las plantas dañinas sólo desaparecen de los jardines, cuando les falta el abono que les nutre la vida.

Pregunta: ¿Nos podéis explicar con más propiedad, lo que significa el predominio del hechizo astral, tomando como base el debilitamiento de la brujería, tal como lo manifestasteis en la explicación anterior?

Ramatís: Fuera de los "candomblés" y otros tipos de trabajos mediúmnicos, que aún conservan autenticidad en BUS prácticas de hechizamiento originados en la tradición africana, la brujería expuesta anteriormente, tiende a desaparecer, por faltarles la dinámica activada por los viejos babalaos y "padres de santos", ya desencarnados. Los substitutos no se hayan a la altura de la responsabilidad asumida, pues son muy pocos los que entienden de magia africana. Algunos jefes de terreiros, graduados a última hora, después de un breve contacto con los viejos negros, salvajes y mestizos, se juzgan capacitados para ejercer la difícil tarea de "babalao" o padre de santo. A medida que la ciencia avanza en el mundo material, los hechiceros, en el Espacio, también descubren nuevos recursos y medios eficientes para proseguir con las prácticas del hechizamiento, en forma independiente de los objetos catalizadores o proyectores de fluidos perniciosos.El hombre terreno descubrió el radar, el control remoto, el avión a chorro, el rayo láser, y el cohete que permitió su alunizaje en el satélite de la tierra. Evidentemente, el progreso, aquí en el Espacio, también es constante y avanza mucho más allá de las conquistas terrenas, pues sería incoherente y absurdo que sólo la vida material alcanzara soluciones superiores. Eso también sucede en el campo de la brujería, en donde los magos desencarnados dispensan del concurso de los hechiceros de la tierra, porque disponen de medios energéticos y del dominio en el campo astralino de la configuración atómica de la materia. Además, repetimos, el constante abastecimiento de sangre, el descontrol por el abuso de las bebidas alcohólicas, drogas y el carnivorismo por parte de los hombres, es una excelente cooperación para obtener éxito en el campo del hechizamiento.Por lo tanto, el desatino humano asume proporciones alarmantes, pues la prostitución alcanza a todas las clases y las criaturas exageran el curso personal, tal como era hábito común entre los paganos de Sodoma, Gomorra, Babilonia, Pompeya y otras civilizaciones señaladas por la penalidad kármica. Hombres y mujeres de cabellos canosos, en vez de imponer respeto a sus descendientes, sacrifican la dignidad de la vejez, compitiendo con la juventud en las bacanales de la carne. Rechazan vivir su condición de venerables "abuelos" cuya madurez significa la condecoración de la existencia física concedida por el Señor en el aprendizaje del mundo, para nivelarse al cinismo, propio de los seres humanos de condición subvertida.

Pregunta: Considerando que los animales y las aves, cuando llegan a la vejez, quedan desamparados, ciegos, agotados, enfermos, paralíticos y hasta maltratados por los compañeros jóvenes, ¿no sería más lógico que fueran sacrificados en los mataderos, en la forma rápida y eficiente y sin tantos sufrimientos 9?

Ramatís: El hecho de que tales seres lleguen a la vejez desnutridos, abandonados, ciegos y enfermos, es culpa de los hombres. Por otra parte, no alcanzan esas condiciones porque los cría deliberadamente para luego matarlos y devorarlos en las mesas "bien servidas", en vez de protegerlos por ser irracionales e incapacitados para sobrevivir sanamente en el seno de la civilización.Los dueños de los esclavos, ¿serían magnánimos por matar a los negros, después de haberlos explotado, alegando la excéntrica disculpa de un homicidio piadoso, a fin de librarlos de la ceguera y enfermedades que pudieran sobrevenirles a la vejez? Después que el hombre explota los productos que extrae de los animales, su deber es protegerlos hasta la vejez, tal como sucede a los hijos, que amparan a sus padres, entrados en años. Por otra parte, los hombres no se preocupan en matar a los monos y a los perros, porque la carne de esos animales, además de desagradable, está "fuera de moda".Actualmente, no se ignora que el hombre procede del linaje animal, que heredó sus características instintivas y que le aseguran el basamento para que el alma se encarne, como función educativa en el mundo físico. Además, sucede como el injerto de la buena planta frutal, cuya base reside, en la calidad de la planta salvaje para desenvolver el potencial de su savia; el psiquismo del hombre actual, también necesitó de la base animal para despertar y desenvolver el sentimiento y la razón.En consecuencia, si el hombre mata prematuramente y devora el animal, también elimina, en el mundo físico, la posibilidad para que otras almas virginales inicien su marcha concienzal bajo los estímulos instintivos, pero creadores del psiquismo inferior. Por lo tanto, destruye el material educativo que apresura y modela la forma del ser puesto en la corriente evolutiva, ca¬mino de la escultura humana. No importa si el buey, caballo, cerdo, carnero y el cabrito puedan llegar a viejos, ciegos, enfermos o maltratados por los compañeros más jóvenes, pero si le cabe al hombre ayudar al animal en su evolución graduativa, antes de transformarlo en materia prima para su insaciable voracidad carnívora. La Administración Divina determina el plazo de la vida física para cada especie animal, por lo cual, no compete al hombre determinar sobre las vidas que él aprovecha, ¿pero que no creó?Hace algunos siglos, en la lucha tenaz por la sobrevivencia humana, el hombre empleaba al máximo su astucia y fuerza animal y se justificaba su preferencia carnívora por falta de alimentación adecuada. De ahí, que el tigre, el cerdo salvaje, el lobo o el búfalo eran los más sacrificados para sustentar al hombre, esto es, las piezas más trabajadas por la naturaleza. Pero, en virtud de su actual superioridad racional, que sabe distinguir lo cierto de lo errado, el bien y el mal, el pecado y la virtud, además de producir alimentación sintética y aprovechar los recursos de las frutas y vegetales a fin de suplir favorablemente, la carencia orgánica de proteínas, vitaminas y minerales, el hombre se incrimina delante la Divinidad por su obstinada preferencia carnívora.

Pregunta: Si la humanidad de nuestro planeta no diezmara con la cacería a los animales feroces y aves de rapiña, ¿el mundo no se saturaría con estas especies?

Ramatís: Los hombres no necesitaron devorar a los animales antidiluvianos, ni a las gigantescas aves de rapiña, para que desaparecieran en la época prevista por el Creador. Las especies monstruosas desaparecieron de la tierra por fuerza de la selección y evolución del mundo. Dios, después de realizar lo más difícil, la creación del Universo, no cometería crasos errores al prodigalizar la vida de los animales y de los hombres sobre el planeta de su vivencia. Cuando esquematizó el globo terráqueo, lo hizo bajo un programa lógico y equilibrado, donde la creación funciona por la ley de la compensación, que corrige e incentiva a las cosas y a los seres para una mejor vida. Bajo tal ley, los conejos, cuya fertilidad al nacer podría saturar al globo en muy poco tiempo, sin embargo, sucumben fácilmente ante el primer descuido. Mientras tanto, el águila y el cóndor, aves de rapiña, resistentes y de gran porte, capaces de llevar animales de regular peso en sus garras, como así también, diezmar a las diversas especies menores, sólo nace un pichón de cada cien huevos. Obviamente, es mucha presunción por parte de los hombres, el querer corregir la obra divina del Universo, que está regulada por leyes tan sabias.

1 comentario:

  1. hola quisera saver ami se me perdio un sueter blanco favroito de el tendedero qusiera saver si esto se presta que te agn una brugeria ya que desde que se me perdio est sueter no e podio encontrar trabajo y me dio una hepatitisde la nada ya que pues no tengo sic omo que muhco contacto con personas ni soy muy asiduio handar aisndo cosas qusera saver si tien una repsuesta y que me recomiendan ya que yo en relaidad me siento vien no me siento enfermo ni nada noms fue de que aprtir de eso de l sueter blanco y camvairon muchas cosas

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